Villafamés es un municipio de la Comunidad Valenciana, que se encuentra a 25 km. de Castellón, en la comarca de la Plana Alta. Villafamés es uno de esos pueblos que tiene su propio encanto, ya que dar un paseo entre sus calles adoquinadas y empinadas, con un ambiente dominado por la tranquilidad, por el silencio, hace que se convierta en una experiencia única. Es como trasladarse al pasado. Al situarse sobre un empinado cerro, las panorámicas que pueden obtenerse son espectaculares, es una pintoresca combinación de montaña y llano.
El casco antiguo de Villafamés se encuentra rodeado por restos de la vieja muralla, y tiene dos partes que se distinguen por su urbanismo. Uno de ellos es el barrio árabe, que se encuentra a los pies del Castillo y que está formado por callejuelas estrechas y reducidas, con casitas muy pintorescas. Y por otro lado, está el trazado regular actual de sus calles, aunque con las dificultades que impone el terreno empinado y montañoso.
Los monumentos y lugares de interés artístico más importantes de Villafamés son: el hermoso Castillo de origen árabe, que ofrece unas maravillosas vistas sobre todo el pueblo y la comarca. La iglesia de la Sang (Sangre), templo más antiguo de Villafamés. La iglesia principal, dedicada a la Asunción. La Roca Grossa, un peñasco de grandes dimensiones situado junto a la vía pública, que se ha convertido en un símbolo geográfico de este municipio castellonense. Y quizás, lo más conocido popularmente, es el Museo de Arte Contemporáneo.
Como dato curioso te comento que cada año, desde el 2004, se lleva a cabo el concurso de «pintura rápida», donde los artistas acuden a Villafamés para plasmar en su lienzos algún motivo relacionado con el municipio. Cada uno de ellos elige un punto de Villafamés para ubicarse y empezar su obra. Tienen una mañana para realizarlo. Las pinturas se exponen en el Ayuntamiento y Museo Contemporáneo, donde también se pueden adquirir.
Después de una mañana de visita por Villafamés, no está de más hacer una parada técnica en el Restaurante El Rullo, donde los bocatas y el buen trato son de tamaño familiar. En este restaurante puedes deleitarte con la gastronomía autóctona de la zona, que incluye la típica olla, revuelto de gambas y ajetes y unas buenísimas paellas. Tiene unos precios asequibles, y es altamente recomendado.